viernes, 19 de febrero de 2010

El orgullo


Recibi esta parábola y quiero compartirla con ustedes. ...Erase una vez, en algun lugar de China, habia um sabio anciano que decidia sobre cuestiones conyugales. Era el quien bendecia a las parejas que querian unirse y orientaba a los que se estaban desentendiendo, diciendoles si deberian separarse o no.Cierta vez, el anciano fue buscado por dos jovenes a quien habia bendecido hacia algunos años y que ahora se querian separar. El sabio, percibiendo que los dos se amaban, no vio motivo para que deshagan la union, pero no lograba convencerlos de eso. Entonces, se presento con una planta y les dijo:— Esta es una planta muy sensíble. Ustedes deben dejarla en la sala y, cuando la planta muera, se podran separar. Asi fue hecho: el matrimonio coloco la planta en el centro de la sala y aguardaba “ansiosamente” su muerte. Cierta madrugada, ambos se encontraron con las regaderas en mano, cuidando de la planta. En aquel dia, se amaron como nunca. La planta sensíble era, en la verdad, la relacion de los dos. El amor era fuerte lo suficientemente al punto de despertarlos en plena madrugada. Pero entonces, Que estaria amenazando aquella union? El orgullo. Pues el orgullo nos impide pedir perdon. El orgullo no nos deja perdonar. El orgullo no nos deja decir que todavia amamos...

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